Es bien sabido que sólo el conocimiento nos hará libres. Libres de creer que hemos inventado la pólvora, o de creer que sómos artistas huérfanos. Paradójicamente, el sistema (las publicaciones, los programas educativos, etc, etc...) siempre tarda en absorver las manifestaciones que se dan con mucha más velocidad de lo que él es capaz de asumirlas, y además es necesario que el tiempo y el casi olvido lo pongan todo en su sitio. Es justo eso lo que ha sucedido con esta generación de artistas, y con estos sucesos que conformaron los Encuentros de Pamplona.
Pamplona tanto como hubiese podido ser Aranjuez o Valladolid ... eso para que nos demos cuenta de que para impulsar cambios, aún en una España Franquista, no hacían falta más que las ganas y ... por supuesto los medios. Gracias hoy a esa familia, que patrocinó todo esto sin saber cómo nos afectaría a las generaciones venideras, a nosotros como estudiantes aquí y ahora.
Y en resumidas cuentas, ¿Qué fue esto?
Fueron ocho días seguidos de manifestaciones artísticas que se tomaron ininterrumpidamente las calles de Pamplona, con la estupefacción de sus habitantes... las seguidas críticas y una ebullición imparable de reacciones. Así pues la ciudad se lanzó a las calles a vivir aquello ...
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